¿Cómo las redes sociales impactan en el desarrollo de la juventud?

En esta época donde la tecnología, y los medios de comunicación digitales, predominan en nuestras vidas, las redes sociales han dejado se ser solo aplicaciones para compartir fotos, cada vez siendo más influyentes en la vida de cada uno de nosotros, y teniendo más impacto del que realmente es notorio; pero…¿Hasta qué punto esto es bueno?

Aplicaciones como Instagram, Tik tok o Facebook, se han convertido en una especie de centro de recreación e interacción, tanto para jóvenes como para adultos, ya que son plataformas por las cuales logramos crear amigos, compartir o expresar ideas, pensamientos o incluso sentimientos más profundos, en algunos casos hasta crear una imagen pública de nosotros mismos.

Actualmente las redes sociales son el entorno social con el que los jóvenes estamos creciendo, pero como todo, tiene sus ventajas y desventajas. Revisemos algunos de estos aspectos. 

Lo bueno: compartir, expresar y crear 

Las redes sociales, tienen aspectos positivos en muchos ámbitos, ya que nos facilitan las cosas. Podemos expresarnos libre y creativamente, compartir ideas, pensamientos, estilos de vida, pasiones, motivaciones, rutinas, talentos e incluso opiniones sobre asuntos sociales.

También han roto barreras geográficas, ahora puedes crear amigos sin importar la distancia, o seguir a alguien que te inspire desde el otro lado del mundo.

Lo preocupante: aislamientos, enfermedades, dependencia…

Cómo no todo lo que brilla es oro, las redes sociales también tienen puntos negativos, que pueden llegar a tener un impacto muy fuerte en la salud mental de los jóvenes, o consumidores. 

Se han evidenciado en diferentes estudios, que las redes sociales están relacionadas con cambios en el estado de ánimo de los jóvenes, fuertes depresiones, episodios de ansiedad, problemas de autoestima, debido a las comparaciones que hacen con las vidas “perfectas”, los estereotipos de belleza que se muestran en redes, y la búsqueda de validación, por medio de likes o seguidores. 

También existe esta adicción al scroll infinito, el cual está llegando a afectar hasta en los horarios de sueño, la concentración y la productividad de los jóvenes. 

Otro factor importante, que causa preocupación, es la privacidad de los jóvenes en redes sociales, muchos de nosotros no somos conscientes de cuántas cosas compartimos, o como las compartimos, no tenemos en cuenta la trata de de datos de las aplicaciones, y no somos conscientes de el acceso que le estamos dando a los demás a nuestra información, esto puede ser una gran problemática, por qué no sabemos quién está detrás de una pantalla viendo las cosas que nosotros publicamos, no sabemos sus intenciones, o sus pensamientos sobre nosotros,de igual manera al momento de ingresar a plataformas nuevas no leemos, o nos informamos lo suficiente para entender por qué es necesario darles acceso a una identificación, un correo, un número telefónico, etc…

¿Cómo podemos controlar estás situaciones? 

La idea no es dar una impresión exagerada de que las redes sociales, sino concientizar un poco sobre cómo las redes están influyendo en el desarrollo de l juventud, y cómo podemos darles un uso más consciente, y moderado; educarnos digitalmente es una buena alternativa para evitar malos hábitos o costumbres en las redes sociales, podríamos aprender a establecer límites en redes y usarlas de manera productiva, conocer sobre qué informaciones son confiables, y entender que no todo lo que vemos en redes sociales es siempre es real.

Conclusión: 

Las redes sociales pueden ser una gran oportunidad, o un problema, según la manera en que las administren, en manos de un adolescente las redes pueden llegar a ser tanto una oportunidad con un riesgo. El verdadero reto es lograr utilizar las redes sin permitir que ellas nos utilicen a nosotros, aprender a tener autocontrol y aprovechar cualquier oportunidad para aprender cosas nuevas y que 

aporten a nuestra formación…